En la vasta y nevada isla de Hokkaido, al norte de Japón, existe un plato que captura la esencia de la convivencia y la calidez entre amigos y familiares: el Jingisukan.
Este plato, nombrado en honor a Genghis Khan, es una celebración de la simplicidad y la riqueza de sabores.
Aunque el vínculo con el conquistador mongol es más simbólico que histórico, el uso del cordero en este plato crea un puente culinario entre culturas y épocas.
El Jingisukan no es solo una comida; es una experiencia.
Tradicionalmente preparado en una parrilla especial con forma de casco, este método de cocción no solo es práctico sino que también añade un toque de historia y aventura a la mesa. Mientras el cordero se cocina a la perfección, los vegetales frescos complementan la carne con su textura crujiente y sabores vibrantes, creando un equilibrio perfecto en cada bocado.
Receta de Jingisukan
Ingredientes:
- 500 gramos de cordero, cortado en láminas finas
- 1 cebolla grande, cortada en rodajas
- 1 pimiento verde, cortado en tiras
- 1 pimiento rojo, cortado en tiras
- Brotes de bambú al gusto
- Champiñones, cortados en láminas
- Aceite de sésamo
Para la marinada:
- 4 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de sake
- 2 cucharadas de mirin
- 1 cucharada de azúcar
- 1 diente de ajo, picado
- 1 trozo de jengibre, rallado
Instrucciones
Preparación de la marinada: En un bol, combina la salsa de soja, el sake, el mirin, el azúcar, el ajo picado y el jengibre rallado. Mezcla bien hasta que el azúcar se disuelva completamente.
Marinar el cordero: Añade las láminas de cordero a la marinada y asegúrate de que estén bien cubiertas. Deja marinar en el refrigerador durante al menos 30 minutos, aunque lo ideal sería unas horas para intensificar los sabores.
Preparar los vegetales: Mientras el cordero marina, corta la cebolla, los pimientos, los brotes de bambú y los champiñones. Reserva.
Cocción: Calienta la parrilla (si tienes una parrilla estilo Jingisukan, mejor) y unta un poco de aceite de sésamo. Comienza por colocar las rodajas de cebolla en el centro para crear una base. Luego, añade el cordero y los vegetales alrededor de la parrilla. Cocina, volteando ocasionalmente, hasta que el cordero esté dorado y los vegetales tiernos pero aún crujientes.
Servir: Sirve el Jingisukan caliente, directamente de la parrilla al plato. Acompaña con arroz blanco y disfruta de este plato lleno de historia, sabor, y comunidad.
El Jingisukan es más que una simple receta; es una ventana a la cultura japonesa y su capacidad para adoptar y adaptar influencias externas, creando platos únicos que se convierten en parte integral de su patrimonio culinario.
Ya sea en una fría noche de invierno o como parte de una celebración especial, el Jingisukan une a las personas, invitándolas a compartir no solo una comida, sino también historias, risas, y recuerdos.
Y recuerda, disfruta del mundo desde casa siempre que puedas.